El director general para la Biodiversidad del Ministerio de Medio Ambiente, José Luis Herranz, reconoció ayer ante las denuncias de organizaciones ecologistas como la Word Wide Foundation (WWF) y Adena, que es necesario 'reconducir' la situación que se está viviendo en la Cuenca Alta del Guadiana, donde 'actuaciones de sostenibilidad dudosa en el uso del agua' por la sobreexplotación de acuíferos está secando Las Tablas de Daimiel y los Humedales de La Mancha, reservas de la biosfera reconocidas a nivel internacional.
En una rueda de prensa celebrada en el marco de la la VIII Conferencia de las Partes de la Convención de Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (COP 8), que concluirá el próximo 14 de septiembre, Herranz admitió que es imprescindible pasar a la acción para 'garantizar la sostenibilidad' de esta zona que, según los defensores del medio ambiente, representa en este momento el proceso de desertificación de mayor relevancia y extensión en España.
El responsable de Biodiversidad rechazó la posibilidad de 'desclasificar' estas dos zonas manchegas como reservas de la biosfera -otra de las demandas de WWF y Adena- y recordó que esta demanda ya se planteó sin éxito en los años 90.
A su juicio, estos espacios, por sus 'características singulares de alto valor ecológico', necesitan de 'actuaciones sostenibles' como las que exige la UNESCO a este tipo de reservas, a pesar de estas 'actuaciones dudosas'.
Asimismo, respondió a las críticas realizadas ayer por Ecologistas en Acción contra el Plan Nacional contra la Desertificación, que será presentado hoy ante las comunidades autónomas en la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente, señalando que el documento, cuya gestación dura ya una década, 'no está cerrado' y que tanto los gobiernos regionales como las organizaciones ecologistas pueden aún incluir sus observaciones antes de sacar el texto definitivo.
Abiertos a sugerencias
No obstante, se quejó de que el borrador del plan ya fue presentado el pasado 15 de junio ante el Consejo Nacional de Bosques, organismo que reúne a ecologistas, empresarios, universidad y organizaciones de diversa índole relacionadas con el medio ambiente, y que 'no recibieron ninguna observación' respecto al escrito.
'Mañana [por hoy] presentamos el plan ante la Conferencia Sectorial de Medio Ambiente y esperamos las observaciones de las comunidades autónomas', indicó Herranz, adelantando que regiones como Valencia, Andalucía, Castilla-La Mancha ya pidieron incluir en anexos dentro del plan los programas específicos contra la desertización que tienen en marcha.
El representante del Ministerio de Medio Ambiente rechazó también las críticas realizadas por los ecologistas sobre la 'falta de compromiso' del futuro plan con la tarea de controlar el desarrollo urbanístico, sobre todo en las costas españolas, como factor desertificador.
Asegura que en el documento final habrá 'una referencia a la ordenación del territorio' que incluya problemas como la construcción descontrolada o su concentración en la costa.
A pesar de que desde Medio Ambiente se muestran optimistas con la posibilidad de conseguir nuevos fondos para la lucha contra la desertificación, uno de los objetivos clave de la COP 8, hasta el momento, reconoce Herranz, ningún país donante ha mostrado voluntad de realizar aportaciones adicionales a la causa.
El alcalde se opone a la descatalogación
del parque como reserva de la biosfera
El alcalde de Daimiel, Jesús Díaz del Campo, expresó ayer su oposición a la 'descatalogación' del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel como Reserva de la Biosfera de la Mancha Húmeda tal y como proponen varias organizaciones ecologistas.
Para Díaz del Campo, en 'las Tablas, si somos respetuosos y metodológicos en la ejecución de los tiempos, podemos conseguir su recuperación y su rehabilitación, pero eso pasa por mantener la catalogación'.
El alcalde de Daimiel reconoció que actualmente 'Las Tablas están en una situación muy crítica, porque permanentemente están desde la UVI a la sala de rehabilitación', pero añadió que 'son muy agradecidas, ya que cuando la climatología les es favorable se recuperan fantásticamente'.
Según explicó Díaz del Campo, actualmente el problema de las Tablas de Daimiel es 'hídrico' ya que los niveles del acuífero 23 'son cada vez más bajos'.
Y añadió que 'estamos trabajando en el Plan Especial del Alto Guadiana, que debe ser lo que garantice la vida hídrica del Parque Nacional'.
'un ecosistema que debemos preservar, guardar y hacer todos los esfuerzos desde las administraciones para que no se pierda', señaló el alcalde de Daimiel, que añadió que el parque ha llegado a tener 400 hectáreas encharcadas gracias a las últimas precipitaciones de la primavera y el trasvase de 10 hectómetros cúbicos.
Además espera que, tras un verano en el que no se ha perdido demasiada agua por evaporación al no ser muy caluroso, las Tablas y los niveles hídricos se recuperen con un otoño copioso en lluvias.
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